Tratamiento médico para lesionados en accidentes de tráfico

Muchas veces al tener un accidente nos damos cuenta de que no sabemos quien debe hacerse cargo del tratamiento médico que necesitamos y nuestra compañía no nos informa de las opciones que tenemos.

Lo normal es que por desconocimiento acudamos a nuestra compañía y nos tratemos en el centro que esta nos indique, con el problema que esto conlleva, es quien paga quien decide que tratamiento y cuantas sesiones rehabilitación nos van a dar.

Pero lo cierto es que tenemos varias opciones que es importante conocer para poder elegir bien ya que se trata de nuestra salud.

Lo primero es tener claro que quien debe hacerse cargo del coste del tratamiento médico es nuestra propia compañía y en caso de no tener o negarse esta a pagarlo debe hacerse cargo la compañía contraria.

En primer lugar, como hemos dicho antes, tenemos la opción de ir al centro al que nos dirija la compañía, con el problema ya citado, lo normal es que nos den el mínimo de sesiones y no nos hagan pruebas, y al alta, aunque nos persistan dolores y molestias no lo reflejen en el informe de alta. Además está el problema añadido que supone que, muchas compañías, para autorizar el tratamiento rehabilitador exigen antes que el lesionado sea revisado por el médico perito de la compañía (cosa que también desaconsejamos, al menos hasta no estar de alta y dependiendo de las circunstancias del caso concreto). Por todo ello esta opción, no es aconsejable.

Otra opción que tenemos es la Seguridad Social, esta tiene un acuerdo con las compañías por el cual nos dan el tratamiento y pasan el cobro a la compañía. Esta opción es buena para acudir a urgencias y para grandes lesionados, ya que el nivel médico es excelente. Pero para pequeñas pruebas o tratamiento rehabilitador tiene el inconveniente de las largas listas de espera.

Qué hacer cuando la compañía no da rehabilitar

La mejor opción es sin duda acudir los centros adscritos al convenio UNESPA, son centros privados que van desde pequeñas clínicas a grandes hospitales los cuales a través del convenio asisten y tratan las lesiones de los perjudicados en accidente de tráfico y le pasan el cobro a la aseguradora, por lo que a nosotros nos sale gratis y nos damos la rehabilitación en un centro privado que no depende de la compañía. Dependiendo de la capacidad del centro podrán incluso hacernos las pruebas médicas que necesitemos. Tiene un beneficio añadido y es que a raíz de la reforma del Código Penal, la despenalización de las faltas y la posterior entrada en vigor del nuevo Baremos 2016, la mayoría de estas clínicas cuentan con peritos que puede además realizar la valoración de nuestras lesiones para reclamar a la aseguradora la indemnización que nos corresponde.

Por último, tenemos la opción de ir al centro que elijamos, bien a través de un seguro de salud o bien a centros privados, y pasarle posteriormente la factura a la aseguradora para que nos la abone. La ventaja de esta opción es que podemos acudir a profesionales que quizás nos hayan tratado anteriormente o con los que tengamos confianza, la pega es que casi siempre tendremos que adelantar el pago y después reclamarlo, por lo que nos puede suponer un esfuerzo económico ya que pueden ser facturas elevadas a las que no todos podemos hacer frente.

Añadir que cuando se va a reclamar una factura médica a la aseguradora, ya sea por tratamiento, medicamentos, pruebas, etc, para que no nos pongan problemas a la hora de abonar la lo mejor es que siempre esté prescrito por un médico este tratamiento, prueba o medicamento, y si es por un médico de la Seguridad Social, ya que son profesionales independientes, ni privados ni de la compañía, se puede acudir a ellos para que nos prescriban la prueba o el tratamiento y después acudir a un centro adscrito a UNESPA o a uno privado para que nos hagan la prueba o nos den el tratamiento prescrito.